viernes, 31 de enero de 2020

Dejé que fluyera

Hoy me di cuenta que estuve varios dias de bajón, me sentía devastada, frustrada, inactiva, y me dije, calmate, veamos que es lo que sucede. Entonces hice una rutina de yoga, la cual me hace muy feliz y permite que conecte conmigo misma, luego hago una meditación de 10 minutos, ahí estuvo la respuesta... Mientras empezaba a meditar, me concentraba en mi respiración y escuchaba una canción de fondo que se volvió mi preferida (heart of Gaia) empecé a sentir una sensación que invadía todo mi cuerpo; dolía, pesaba, me sentí triste, pero la meditación me llevó a sentir y dejar de lado los pensamientos, las razones, los por qué; sólo me deje llevar, sólo sentí, y lloré , lloré como una niña. Me permití llorar, no había un yo que me dijera, no llores, cálmate, ¿por qué lloras? , ¿Qué te pasa? , vos sos fuerte... No, simplemente permití que fluyera la emoción. Cuando termine, y abrí los ojos me sentí como una hoja, así de liviana, sin pensamientos de nada, solo un sentimiento de bienestar. Después de ese día, he pasado los días tranquila, y me siento feliz. Porque sé que puede volver la sensación, pero ya se cómo amarme y prestarme atención.
Creo que fue enero, el miedo de un inicio, lo lento que pasó..

Primer minuto del 2020

Hoy pensé algo que me gustó, viendo las luces de las 12 pm del último dia del 2019, en el lago más lindo del mundo, sentí la felicidad con que es celebrado, el cielo iluminado con luces increíbles, cada luz me vibraba con alegría, con satisfacción de haber terminado un año y la bienvenida que damos al nuevo. Me sentí parte de esta fiesta, me sentí parte de esa sensación que experimenta el ser humano.
Somos excepcionales, abundantes, merecedores, únicamente tenemos que creerlo!! 🥰